" Formamos jóvenes josemitas responsables y conscientes de su protagonismo en la sociedad "
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Ver galería >Somos una institución católica fundamentada en los principios de ciencia, unión y humildad, con énfasis en orientación tecnológica y empresarial, cultivando la sabiduría al servicio de la sociedad, estamos comprometidos en el rescate de valores para una formación integral del ser humano, que trabaje por el bien común, que transforme su entorno social y tengan una excelente calidad de vida.
En la 2026 el COLEGIO INTEGRADO SAN JOSÉ será una institución educativa de orientación católica, comprometida con un servicio de calidad, se apoyará a través de su portal educativo, permitiendo que las tecnologías de la información y la comunicación sean un recurso metodológico que integran lo técnico y lo humano enfocada en formar integralmente hombre y mujeres que modifiquen y generen soluciones inmediatas al mejoramiento económico y al desarrollo de sus comunidades y la sociedad.
El COLEGIO INTEGRADO SAN JOSÉ ofrece a sus estudiantes una formación integral con énfasis técnico empresarial, conforme a los lineamientos del ministerio de educación. Contamos con modernas instalaciones y un recurso humano altamente calificado y comprometido en el mejoramiento continuo de los procesos del SGS, buscando así satisfacer las necesidades y expectativas de los padres de familia y estudiantes, con base a una formación segmentada en una efectiva comunicación y un ambiente favorable.
El padre de familia Josemita se identifica con la filosofía de la institución y con la nobleza de nuestro Patrono San José, custodio de la Sagrada Familia.
Nuestros educadores forman bachilleres capaces de tomar decisiones autónomas, responsables y con integridad. Por eso son educadores:
Comprometidos con la institución, leales a los principios y valores del colegio ante propios y extraños; que sepan que sin su colaboración plena esos principios y valores quedan muertos en el papel, que sepan que su valor no termina al culminar las clases porque son maestros por vocación.
Suscitan en sus estudiantes el pensamiento propio, que no crean en decirles la verdad sino que les dan herramientas y medios para que en su propia imaginación e incentivo, disfruten la grata ventura de encontrar su propia verdad.
Están a la vanguardia de los acontecimientos globales y locales para aprovechar y hacer el debido análisis con sus estudiantes, sacando de allí conclusiones prácticas de sensibilidad, solidaridad y fraternidad.
Convencen porque deben estar conscientes que todos los deberes morales, espirituales, intelectuales y materiales no son de hecho exclusivo sino que cumplen con una función.
Educadores que no prediquen violencia ni comuniquen resentimientos o insatisfacción por el estado de justicia social en la que vivimos.